Wolf Ludwig llega a los Estados Unidos desde Alemania Occidental, con su esposa, Ursel, y sus dos hijos pequeños, Ralf y Peter. Primero trabaja como carnicero y productor de salchichas, luego como especialista en aplicaciones, y posteriormente como vendedor para una importante compañía fabricante de fundas de colágeno. Luego se dedicó a la venta de bienes de capital para un proveedor líder de la industria.